Rondaba el año 1988 y la Peña Taurina Tudelana "el Brindis" puso en marcha el homenaje al Tudelano o Tudelana ausente para “
tener un cálido recuerdo de aquellos tudelanos/as que por distintos motivos han debido marcharse de Tudela, pero con la siguen manteniendo una conexión muy directa”.
En sus inicios, el acto no era tal y como hoy lo conocemos. Durante los primeros años consistía en mandar cartas a las casas regionales de España e invitar a los tudelanos a pasar aquí esa jornada festiva con un vermút y la actuación de la Escuela de Jotas.
Entrados los 90 se decidió que el homenaje recobrara vida, tuviera nombre y apellidos y desde 1994 es una persona elegida por la peña la que recibe el título de “Tudelano o tudelana ausente”. Los requisitos: ser tudelan@ de nacimiento y residir fuera de nuestra ciudad.
El procedimiento para designar a esa persona que recibe el homenaje es muy sencillo: son los miembros de la peña quienes escogen, según su criterio, a la persona que consideran como el/la mejor representante de este particular ‘galardón’.
Sobre las 13:30 horas del día 25 se realiza el homenajeado en la sede de la Peña en la plaza de Jehudá Ha-Leví donde recibe una placa y disfruta de una actuación de jotas, la Comparsa de Gigantes y Cabezudos y la Banda municipal de música.